BIENVENIDOS A SU CASA

Lost in Costa Rica está en uno de los terrenos con altura de Barrio Los Yoses, cuyos planificadores respetaron la topografía de desniveles y pendientes. Se asciende al Hostel desde el nivel de calle  ( contamos también con otro acceso para discapacitados) y al ascender,   descubrimos un  espacio arquitectónico de líneas simples y amplios ventanales que dan luz natural a las habitaciones, y un patio que une los dos bloques de dos pisos que conforman un agradable espacio urbano. Desde ese patio y desde muchas de las habitaciones pueden verse parte de  las montañas del Valle Central. Eso es lo asombroso de nuestro Hostel, su arquitectura ofrece un  espacio urbano, muy céntrico, pero  con vistas panorámicas, árboles,  aves, creando una experiencia única de contacto con la naturaleza en un barrio de la ciudad.

EL BARRIO LOS YOSES

Al encontrarnos en el barrio Los Yoses, antiguamente tierra de fértiles cafetales,  uno de los barrios más emblemáticos de la ciudad de San José (Chepe, en la jerga citadina) caminar por el vecindario permitirá descubrir su arquitectura. Todo queda cerca de nuestro hostal: Paradas de buses,  museos, supermercados,  universidades, cines, academias de lengua, centros culturales, bares, restaurantes, centros comerciales, parques, templos. Esta cercanía con todo nos convierte en un hostel ubicado estratégicamente para facilitar traslados y nuevas experiencias.

DECK AL AIRE LIBRE

Queremos que nuestros huéspedes encuentren reposo en el  ambiente entusiasta  logrado  por una decoración plena de detalles naturales y  artísticos. Deseamos que nuestros huéspedes se conecten rápidamente entre sí, en una camaradería que genera el ambiente alegre y relajado del Hostal.

Estamos empeñados en crear un intercambio con los núcleos culturales de nuestro entorno (academias de yoga, de baile popular, grupos ambientalistas) que brinde nuevos conocimientos a nuestros huéspedes.  Nos empeñamos también en un riguroso plan de uso de productos amigables con el ambiente.

CHILL OUT ZONE

ENTRETENIMIENTO

Lo bueno de los viajes es que nos juntan con almas y energías afines que nos enriquecen. Compartimos vivencias, experiencias, sentimientos. Y sin casi percatarnos se va conformando una comunidad muy rica por su variedad de idiosincrasias,  de nacionalidades, un grupo  en el que se aprende unos de otros hasta conformar una verdadera comunidad.

COCINA COMPARTIDA